31 enero 2006

Mi obsesión

En estos días quizás tengo demasiado tiempo para pensar, pero no
puedo parar.

Hoy mientras estaba en el dentista haciendo una limpieza de esas que
hago cada 2 años, ni me daba cuenta de lo que me estaban haciendo, y
eso que tengo los dientes sensibles. Pero nada. Mi obsesión es
comprender la razón por la cual no estoy enamorado de la chica con la
que estoy. Me duele. Me duele mucho y me da una congoja que me
aprieta el pecho.
Ella es lo que todos dirían: la chica perfecta para mi. Cuando mis
amigos nos ven juntos hacen esa sonrisa boba, cómo a decir: por fin
has encontrado la que te va bien.
Pues no.
Que le puedo hacer. Intento investigar las razones por las cuales no
me siento enamorado y no las encuentro, pero sé perfectamente que no
lo estoy.
¿Que falta?
Nada. Ella es fantástica tal y como es. Es sin dudas una de las
mujeres más inteligentes que yo haya conocido, y no es porqué habla
chino y otros 5 idiomas casi a la perfección, sino por su capacidad
analítica de la realidad, de las emociones y de las relaciones. A
ella le es suficiente una mirada para captar el sentido de toda la
situación. Pero nunca dice nada. Luego, al cabo de unos meses
describe cada situación que hemos vivido con una lucidez abrumadora.
Seguramente es mas inteligente que yo y eso no ayuda. Sólo nos falta
eso ahora.
Es la mujer mas afable con la que me he relacionado. Además es muy
amiga de sus amigos y una gran anfitriona. Todos están encantados con
ella. Haga lo que haga, siempre tiene la palabra justa dicha al
momento justo. Todos se sienten importantes estando a su lado. Todos
se sienten considerados.

Tengo que admitir que cuando miro a una chica empiezo mirándola desde
abajo. Mi fijación son los pies y los tobillos. No sé porqué pero
cuando era adolescente y pululaba alrededor de una pandilla de
mayores, el que tenía mas éxito con las chicas, decía que de unos
buenos tobillos se puede intuir la firmeza del culo. Y a mi hay
frases que me han marcado. Puede que esa fuera una de las que lo han
hecho. Pues bien, mi chica tiene unos pies y unos tobillos que me
hacen babear.
Sus manos son delicadas, sus labios carnosos piden besos y no puedo
evitar de pasar por encima de ellos mis dedos. Como si el hecho de
tocarlos los convirtiera en mas reales o deseables.
Es dulce como la miel y hacer el amor con ella siempre es gratificante.
¿Cómo es posible que no esté enamorado de ella?
Yo mismo no encuentro respuesta y lo paso mal. He llegado a llamarme
idiota a mi mismo pero no sirve de nada.
Estar con la mujer que tu cabeza te dice que es perfecta para ti, y
que tus amigos dicen que es perfecta para ti, y no estar enamorado es
una tortura, pero aun peor es pensar en la separación, porqué no
estaré enamorado pero la amo con profundidad y me encanta compartir
cosas con ella.

Vamos a ver que pasa.
Suerte que en estos días está en Berlín.

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