28 enero 2006

Soltero

Hace casi un mes que estoy experimentando la sensación de estar soltero y me doy cuenta del porqué durante años lo he evitado inconscientemente con todas las cautelas y enfrentandome a la dureza consecuente.
He llegado a la conclusión que ser soltero es una verdadera mierda. Mientras estás con una chica siempre hay ese maldito diablillo que te silba en la oreja diciendote que si te quedas soltero te podrás tirar a esa o a la otra, podrás hacer esto y lo otro, pero luego, cuando llega el momento y lo intentas, te das cuenta que después de un par de éxitos ya no tienes ganas de follar otra vez con una persona nueva. No quiero decir que no sea excitante, que lo es, porque a nivel hormonal tocar una piel desconocida y respirar un nuevo olor es inhebriante, pero queda claro que todo lo que sucede después es un coñazo. Si dices de antemano que solo te interesa follar tienes el 80% de posibilidades que no llegues a concretar nunca tus deseos. El 20% restante de posibilidades se dividen en:

A. El polvo del siglo, bueno, mejor dicho del año, o quizás del mes y entonces te entran ganas de repetir, pero mira tu por donde, ella tiene novio o quiere follar con gente siempre nueva o dios sabe cual otra excusa, y al final es ella la que no quiere o no puede repetir y te dejará tirado en la cuneta y eso duele al orgullo varonil que todos tenemos dentro. Pero si consigues repetir unas cuantas veces acabas diciendo que te encanta estar con ella. Y consecuentemente acabarás saliendo con ella. Cosa de la que te arrepentirás durante meses, porqué en realidad no tienes nada que commpartir con ella.

B. El peor polvo de la semana pero no del mes. Un polvo mecanico frío, sin ninguna emoción si palabras cariñosas dichas al oido, sin las marcas de las uñas en la espalda. De esos polvos que acabas y casi ni te miras, lo único que quieres es desaparecer o que desaparezca, dependiendo del lecho donde se ha praticado tan éxitoso encuentro.

De otra manera nos queda mentir y seguir el ritual aceptando lo que ellas piden para llegar a lo que nosostros queremos. Resultado: en mi caso acabo sintiendome como el villano de la película. Ellas me dicen que les miento y no merezco respeto (y en parte tienen razón. La parte que tiene que ver con las mentiras, pero no la del respeto).

Así que me no me queda otra opción que enamorarme. Entonces todo cambia. ¿Pero qué hago hasta ese momento?